Cadáver de Netflix, sobrevivir a costa de tu humanidad

Cadáver de Netflix

Cadáver de Netflix, sobrevivir a costa de tu humanidad

Cadáver de Netflix es una película del 2020 cuyas críticas positivas se deben más a su fecha de estreno, que a su trama. Si bien la película no es mala, es fácilmente comparable a otras tantas por el estilo, lo que la vuelve predecible y simple, aun así, por estrenarse en finales del 2020, con la cuarentena manteniendo a todos alertas, consiguió un muy buen resultado.

Las películas sobre temas apocalipsis ya llevan un buen rato, y la idea de que personas en situaciones precarias, por casualidad, o ambas, se refugien en algo aparentemente demasiado bueno para ser real, ya son cosas que hemos podido ver una gran cantidad de veces. Si no eres un gran aficionado de este tipo de filmes, y, por tanto, no has visto la mayoría, puede que la película te resulte muy interesante, pero si es el caso contrario, probablemente te aburra.

 

La trama

Seguimos la historia de Leonora, su hija Alice y su esposo Jacob. Nos encontramos en una ciudad destruida, luego de que el país sufriera un accidente nuclear. Las pocas personas que han sobrevivido están hambrientas, y muchos de ellos han comenzado a vivir como animales.

El panorama es muy desolador, mientras que Leonora es todo lo contrario, es una mujer que cree firmemente en que todo mejorará, y hace lo posible para mantener a su hija sana y feliz. Cierto día, se acerca a la ciudad una caravana con un hombre que les ofrece a todos la posibilidad de asistir a uno de los últimos hoteles que quedaron de pie, dónde se les dará una comida gratis, además de un espectacular show en vivo.

A pesar de la terrible idea que parece ser seguir a un hombre desconocido, en pleno apocalipsis, a una supuesta salvación, nuestros protagonistas terminan aceptando las invitaciones, con Leonora bastante emocionada ante la idea de un espectáculo, siendo ella, una actriz retirada. Ya en el lugar, todo es sumamente lujoso, y el anfitrión cumple con su palabra de regalar una comida, luego, les pide a todos que utilicen unas máscaras, recordándoles que por nada del mundo se las deben quitar.

Así empieza esta aventura, con todos los invitados enmascarados persiguiendo a algún actor que les llama la atención. Todo es demasiado dramático, o incluso turbio, al punto en que muchas veces no están seguros de si todo esto es una actualización, o si es real.

Lo único que saben es que su anfitrión les dejó muy en claro que todo lo que verían a continuación sería parte del show, por lo que no pueden hacer mucho. Poco después, los protagonistas se dan cuenta de que las personas parecen desaparecer, y en medio del caos, pierden a su hija, y sus respectivas máscaras.

Ahora, están del lado de los actores, ambos irán descubriendo el secreto detrás de este hotel, mientras buscan desesperadamente a su hija.

Cadáver de Netflix, sobrevivir a costa de tu humanidad

Crítica

Con esto, que es apenas los primeros 20 0 30 minutos de la película, ya podemos estar muy seguros de hacia dónde se dirige el fin. ¿Cómo alimentan gratis a otras personas, si los alimentos escasean? La respuesta más obvia, es sin dudas la correcta.

 

Convertirse en animales

Apenas entran al hotel, el anfitrión les recuerda algo muy importante a sus invitados, y es el hecho de que, en una situación tan precaria como la que vivían actualmente, no era en nada distinta a la realidad de los animales, puesto que vivían solo para sobrevivir, contrario a los humanos, que requerían expresarse y sentir, de ahí el por qué de su hotel. Así mismo, les menciona las atrocidades que estos animales cometen al tener que luchar por recursos, como por ejemplo, comerse entre ellos mismos.

Esto es precisamente lo que vemos más adelante, la revelación de cómo el anfitrión utiliza a los invitados para obtener más carne, y así alimentar tanto a los actores como a los siguientes invitados. Lo verdaderamente extraño de todo esto, es el supuesto hecho de que ningún actor sabía la verdad.

Según se hace ver, muchos pensaban que simplemente les robaban a los invitados, y vendían sus cosas, pero ¿a quién le habrían de vender y comprar algo en plena escasez de alimentos? No es como si un reloj pudiera ser suficiente para pagar una sola bolsa de arroz en estas condiciones.

La simple idea es demasiado ingenua, tanto como las personas que entraron al hotel creyendo que realmente no tendrían que pagar el precio de una comida gratis y un espectáculo.

 

La niña

Hay momentos en los que podemos suponer que Alice está muerta, sin embargo, cualquier duda desaparece cuando vemos la fotografía de alguien parecida a ella junto al anfitrión. Es de esperar que, al perder a su propia hija, el anfitrión quiera hacerse con esta otra niña debido a su parecido.

Lo que no se entiende es por qué permite entonces que Leonora y su esposo se queden en el hotel, a sabiendas de que jamás dejarán de buscar a su hija, y que probablemente causarán un desastre por lo mismo. Si vamos al caso de los demás actores, todos están allí siguiendo las órdenes del anfitrión porque este les ofreció una mejor vida a ellos y a sus familias, cosa casi imposible de resistir, pero en el caso de Leonora y Jacob, lo que hace es arrebatarles aquello que aman, ¿cómo alguien que toma todo desde el punto de vista lógico/animal puede esperar que ellos olviden a su hija?

 

El final

Por último, una vez que escapan y acaban con el anfitrión, Leonora y su hija regresan al mundo «real», sin nada que comer, sin lujos ni ninguna comodidad, con muerte por todas partes, enfermedades, peligros… Viendo todo esto otra vez, Leonora mira hacia el hotel, como por si primera vez en la película comenzara a entender al anfitrión, y ver las cosas desde su punto de vista.

Al final nos queda una cosa muy clara, por más que queramos señalar al anfitrión como el malo de la película, más de uno estaríamos inclinados a ser parte de su hotel, si nos encontramos en la misma situación.