El cisne negro vs Perfect Blue, paralelismos psicológicos

El cisne negro vs Perfect Blue

El cisne negro vs Perfect Blue

Muchos no saben que El cisne negro es de hecho, una adaptación libre de la película anime Perfect Blue, de 1998. Esto se debe a que Darren Aronofsky, el director de El cisne negro, reconocido por su famosa obra, Requiem for a Dream del 2000, compró los derechos del aclamado filme japonés, Perfect Blue, luego de quedar completamente encantado con esta.

Pero, ¿Qué es Perfect Blue? Si bien es conocida por el público amante del anime, sigue siendo una película desconocida en occidente, y más aún debido a su trama.

 

La trama de Perfect Blue

En esta película tenemos la historia de Mima, una cantante Idol japonesa, a la que un día se le ofrece la oportunidad de convertirse en actriz, en una serie adulta. Aunque ella desea avanzar en su carrera, duda al inicio debido a que muchas de las escenas son de situaciones que como Idol, no podría hacer, por lo que debe decidir dejar esto atrás, así como su forma de ver el mundo tan infantil, para poder lograr lo que desea. 

El problema recae en que esto es demasiado para ella. Para quienes no lo saben, las Idols no son solamente cantantes pop, sino que son la imagen de la perfección, la niña perfecta, la hija, hermana, o novia perfecta, infantil, hermosa y pura. Por esto, tener un cambio tan radical no solo la afecta a ella, sino que puede hacer que su público se decepcione de ella, o la odie, o al menos, es así como ella lo ve.

Todo su estrés llega al punto de causarle alucinaciones, en las que ve a la versión Idol de sí misma tratándola mal por “traicionar” su forma de ser, y a sus fans. A esto le sumamos a Rumi, su representante que actúa como su figura materna, que busca cuidar y mantener de forma enfermiza esta imagen de pureza, ya que se ve reflejada en Mima, como el sueño que ella misma nunca pudo alcanzar durante su carrera pasada.

El cisne negro vs Perfect Blue

La trama de El cisne negro

Por otra parte, Nina es una bailarina de ballet, que es de hecho, la carrera más parecida que existe en occidente al “Idol”, pues aunque no es una cantante, si solemos imaginar a las bailarinas de ballet como la imagen misma de la feminidad, a la vez que es un trabajo incluso más demandante físicamente, pero con más libertad en el área personal.

Nina, al igual que Mima, es como una niña, tiene una visión del mundo bastante infantil, y suele actuar de esa manera. Tiene a su madre, quien se proyecta en ella como el sueño que nunca cumplió, ya que no pudo seguir bailando después de quedar embarazada. 

Ella presiona a su hija en todo momento para que sea pura y perfecta, al grado en que lo sería una Idol, solo que en esta ocasión, a la protagonista la tienen completamente controlada en contra de su voluntad.

Su cambio inicia cuando llegan las audiciones de “El cisne negro”, un ballet donde la bailarina principal debe mostrar tanto la pureza del cisne blanco, como la maldad del cisne negro. Siendo la segunda parte, la razón por la que no la aceptan, ya que ella no muestra la fuerza necesaria para interpretar el ballet.

Sin embargo, igual le dan el puesto principal, luego de que el director la obligara a besarlo, ocasionando que ella reaccione de manera un poco violenta. Es debido a su obtención del puesto, y la forma en que lo hizo, que todo su mundo comienza a cambiar.

Ella se preocupa demasiado por el qué dirán los demás, al igual que lo hace Mima cuando piensa en sus fans, pero ahora, con Nina pensando en sus compañeras y su madre. Duda de su propio talento, duda sobre su vida, y la forma en que se comporta. 

Esto va escalando, teniendo cada vez más alucinaciones, en las que su comportamiento se vuelve más errático. Todo esto es como una liberación para ella, la gran metamorfosis hacía lo que siempre quiso ser en el fondo, pero que no había logrado debido a todas las prohibiciones y sobre protección de su madre.

El cisne negro vs Perfect Blue

La razón detrás de El cisne negro

Desde el primer momento Darren tenía la intención de hacer un Live Action de Perfect Blue, lamentablemente, habían muchos problemas a la hora de adaptar la trama, en el cual resalta la profesión de Mima, que como se mencionó antes, pasó de ser una Idol a una actriz. 

Como en occidente no existe el concepto de una Idol, el plantear a Mima como una cantante pop no quedaba del todo bien. Aunque podría hacerse un paralelismo con casos como Miley Cyrus, cuando tuvo su etapa de rebeldía luego de salir de Disney, o incluso Selena Gomez actuando en Spring Breakers, lo cierto es que a no hay tantos referentes en occidente, como para que un cantante sea visto como un ser “perfecto”. 

Hoy en día, gracias a la fama de los grupos kpop, muchas personas pueden hacerse una idea de lo que es un Idol, sin embargo, puesto que este concepto es extraño para nosotros, seguimos viendo a esos artistas como personas, y no como la definición de “perfección”, por la que se les conoce en los países asiáticos.

En este caso, no había una mejor opción que el ballet, reconocido por ser tan complicado, por requerir tanta pasión y dedicación que puede llegar a consumir otros aspectos de la vida. Pero claro, cambiar la profesión de Mima era cambiar toda la historia, y el foco central de la misma, por lo que volver a hacer una película, con el mismo significado, pero en un contexto tan distinto, era muy complicado.

Aun así, el resultado fue sorprendente, llegando al punto de no ser considerada en lo más mínimo como un Live Action, sino como una historia alterna, o una adaptación muy libre, y si hay algo que se mantiene sobre todo, marcando la conexión entre ambas obras, es el tema de los problemas psicológicos que ambas protagonistas tienen, y que terminan aceptando, para poder liberarse y renacer.

Estos problemas, que recaen en los propios mecanismos de defensa que causa sus mentes para protegerlas del golpe de realidad que les cae encima, junto con el cambio brusco de ambiente y personalidad, que las deja tan indefensas, terminan haciendo que pierdan el control de sus acciones y realidad. 

Se podría decir que su diferencia más grande recae en su final. Mientras que Mima toma las riendas de su vida, saliendo adelante en su nueva vida, Nina termina ahogada por sus problemas y pérdida de la realidad, terminando su vida, justo después de cumplir su sueño.