Martyrs, preguntas sin resolver

Martyrs

Martyrs

Si lo que quieres es ver una película “cruda”, cargada de significado, dudas existenciales, y gore, muchas de las mejores opciones, entre los filmes actuales, serán sin duda alguna los producidos por Francia. Con películas como “Raw”, “À l’intérieur” y “Suspiria”, podemos ver un estilo muy marcado, que difícilmente puede ser imitado por Hollywood, como ocurre con Martyrs y su versión estadounidense.

Martyrs es una película cuya trama se centra en tres puntos, la venganza, los traumas, y el más allá. Tenemos escenas de violencia desmedida, ataques psicóticos, y una gran pregunta que queda en nuestra mente al terminar de verla.

 

Resumen

Seguimos la historia de Lucy y Anna. Lucy es una chica que fue torturada durante su infancia por una especie de secta, de la cual logró escapar años después. Al pasar tanto tiempo allí, y sin ningún familiar que se hiciera cargo de ella, termina en un orfanato, donde es tratada como una loca, por las secuelas de su trauma.

Anna, otra huérfana, se convierte rápidamente en la mejor amiga de Lucy, y se encarga de cuidarla hasta que ambas llegan a la adultez. Apenas con unos pocos minutos de película vemos a Lucy, ya adulta, entrando a una casa a asesinar a todos los integrantes de la familia que vivía allí. Poco después nos enteramos de que esta familia eran quienes la torturaron en su juventud.

Al cumplir su venganza Lucy se siente un poco mejor, pero su aparente calma no dura más que unos segundos, puesto que comienza a atacarla una mujer torturada y demente, a la que Lucy llama “monstruo”. Sin tener idea de qué más hacer, Lucy llama a Anna para pedirle ayuda, a lo que Anna va sin pensarlo dos veces, quedando sorprendida al ver la horrible escena del crimen.

A pesar de que sabe que todo esto está mal, decide que lo mejor es ponerse del lado de su amiga, limpiando la sangre y enterrando los cadáveres, para poder huir de allí juntas. Todo parece haber terminado, hasta que Anna se da cuenta de que la madre de la familia sigue con vida, e intenta salvarla, sin saber que esta es quien causó tanto daño a su amiga.

Sus planes salen mal, Lucy igualmente logra asesinar a la mujer, y Anna, incapaz de comprender a su amiga, creyéndola una lunática, descubre la verdad al ver el sótano de la casa. En este lugar se encuentra con otra chica torturada, la cual parece temerle a todo, debido a sus múltiples traumas. 

Ella quiere hacer todo lo posible para ayudarla, quitándole las cadenas, intentando bañarla y alimentarla, pero esta persona se encuentra en un estado tan lamentable que es casi imposible de tratar, y reacciona a cada cosa que Anna hace, como si se tratara de otra tortura más. Mientras tanto, Lucy se retuerce y se causa daño a sí misma a raíz de sus alucinaciones constantes con este “monstruo” que no deja de perseguirla. 

La existencia de estas visiones se nos revelan mediante flashback de la infancia de Lucy, cuando, al escapar, dejó atrás a otra mujer que se encontraba en su misma situación, por miedo de ser atrapada en el proceso. Esta culpa la carcome toda su vida, llevándola a cometer los asesinatos en un intento de apaciguar al espíritu de la pobre chica. 

La película da un giro cuando llegan a la casa un grupo de personas armadas, asesinan a Lucy, y toman prisionera a Anna. Ellos son parte de la secta, y, su líder, Mademoiselle, se acerca a ella a contarle la razón de todo esto, hablando de una forma en que suelen hacerlo los fanáticos religiosos.

Mademoiselle habla sobre los Martyrs, personas que a través de la historia han sufrido una tortura tan grande, que logran ver “el más allá”, aún sin haber fallecido. El propósito de su secta es encontrar a personas “adecuadas”, para pasar por el proceso necesario para llegar a este punto de iluminación, y así poder escuchar de ellos lo que se encuentra del “otro lado”. 

Habiendo dicho esto, señalan que Anna es una candidata perfecta para ser un Martyr, y proceden a tratarla como tal, pasando por golpizas, adiestramiento y, lo más resaltante de la película, el desollamiento de Anna, a quien nos muestran sin un solo trozo de piel en su cuerpo. Luego de todo esto, tal y como habían esperado, Anna llega al estado de “Martyr”, contándole lo que vio a Mademoiselle.

Lejos de cumplir con su propósito de contar a toda la secta el descubrimiento, Mademoiselle se suicida, llevando felizmente el secreto a la tumba. 

Martyrs

Crítica

La película puede resultar un tanto lenta y extraña para muchos, con el tipo de trama, y la forma en que se desarrolla, sin dejar las cosas del todo claras, y con una pregunta que jamás es respondida. Aun así, las actuaciones son buenas, si eres fan del terror y horror psicológico la trama te atrapa, y a pesar de que no es el tipo de película que veríamos más de una o dos veces, es muy recomendable.

Se tocan temas que hasta cierto punto nosotros mismos solemos pensar, cómo el qué hay en el más allá, mostrándolo desde el punto de vista de personas obsesionadas con encontrar esta respuesta. Además, tenemos un buen desarrollo de los traumas, como audiencia, realmente creemos la existencia del “monstruo” que atormenta a Lucy hasta que la verdad es revelada, aun si no entendemos del todo lo que sucede. 

Una de las cosas que se dejan al aire es la razón por la cual Mademoiselle se suicida, esto, en realidad, no tiene una respuesta, puesto que la idea de esto es justamente que la duda permanezca en la mente del espectador. Por supuesto, podemos adivinar sus razones fácilmente, las cuales radican en dos opciones:

  1. Al ser el único deseo de su vida el conocer la verdad, se queda sin una razón para vivir luego de saberlo, y al sentirse de esta forma, se torna egoísta y apática, no queriendo compartir el secreto, decidiendo matarse sin el más mínimo remordimiento.
  2. Lo que hay después de la muerte resulta ser un concepto tan fuerte que Mademoiselle no logra cargar con este peso, y, pensando que nadie más que ella tiene el derecho a saberlo, considerándolos indignos, se suicida. 

De cualquier manera el resultado es el mismo, y lo importante de todo esto es hacernos pensar en qué tipo de respuesta nos llevaría a nosotros mismos a tener este tipo de reacción que parece ser tan exagerada, pero que a su vez resulta natural y esperada.