Ruido de fondo: El miedo a la muerte

Ruido de fondo

Ruido de fondo

Ruido de fondo, basado en un libro, es la nueva película de Netflix, sobre una familia que se enfrenta al temor a la muerte.

 

Jack y su familia

Todo inicia con Jack, un profesor de la universidad, que se especializó en todo lo relacionado con Hitler, y por ello se la pasa dando conferencias sobre eso. Él, junto a su amigo Murray, otro profesor, tienen vidas relativamente normales.

Jack está casado, y vive con los hijos de ella, su propio hijo, y el hijo que tienen en común. Al ser una familia tan grande suele haber cierta cantidad de desorden.

Algo que llama la atención desde el principio es que en esa familia muchas veces se quedan hablando sobre temas relacionados. Sobre la muerte, la vida, y poco más.

Se da a entender el temor que siente cada uno hacia la muerte, pero el tema no llega a más por el momento.

Las primeras cosas extrañas se empiezan a notar cuando Denise, la hija mayor, descubre a su madre botando una caja de pastillas inusuales. Ella intenta averiguar sobre esto, pero al final no consigue la razón para la que sirven esas pastillas.

Denise le cuenta a su padre lo que ha visto, pero esto pierde importancia cuando su hermano la llama para ver un accidente de avión en las noticias.

 

El entretenimiento y la muerte

Un punto que resaltan en varias ocasiones es la fascinación que tienen las personas con la violencia y la muerte, pese al miedo. Para señalar su punto usan como ejemplo la televisión y los programas violentos.

Al ver a la familia reunida viendo la grabación del accidente, se menciona sobre lo cerca que se sienten a los hechos gracias a esto. Parecen querer sacar a relucir el morbo que sienten.

Ruido de fondo

El gas tóxico

Los días siguen con normalidad, hasta que un camión que contienen gas tóxico tiene un accidente. Por este, la ciudad debe ser deshabitada, para evitar cualquier peligro.

Al principio piensan que, al ocurrir tan lejos, no debería causar ningún daño. Pero, no tardan en entrar en pánico al más mínimo síntoma, por lo que terminan siguiendo a sus vecinos a un refugio del gobierno.

Por desgracia, se dan cuenta de que en ese lugar no están ni remotamente preparados para protegerlos. Al contrario, el gobierno parece querer hacer muy poco al respecto.

Todos entran en pánico, aterrorizados por la idea de morir, mientras una nube de gas tóxico se cierne sobre ellos.

Al final, este gas termina por desaparecer como si nada, y todos regresan a sus vidas normales.

Si bien todos se siguen sintiendo bastante cercanos a la muerte, no tienen más que seguir adelante. En las siguientes escenas, ni siquiera parece que haya ocurrido algo.

 

El temor y la adicción

Se ve un poco de paranoia en Jack, que no puede evitar pensar que el gas tóxico alteró su cuerpo de alguna manera. Por esto, va frecuentemente al médico a hacerse todos los exámenes posibles.

Los personajes principales muestran alguna que otra señal de haber sido afectados, al menos psicológicamente, por todo el trauma. Sin embargo, no se profundiza mucho en esto.

En vez de eso, se centran en la esposa de Jack, que no deja de actuar extraño. Ha empezado a salir durante las noches, y su hija sigue encontrando las misteriosas pastillas, y, sin más opciones, le exige a su padre que averigüe la verdad.

Jack pregunta a sus conocidos médicos sobre el medicamento, pero nadie parece conocerlo. Algunos le dicen que puede ser que no haya salido al mercado, y que se trate de una sustancia ilícita.

Cuando al fin le pide respuestas a su esposa y ella le confiesa que, debido a su temor a la muerte, se unió a un experimento.

Le dice todo sobre los experimentos, en los que debía tomar un nuevo medicamento que tenía la intención de quitar el miedo. No obstante, ninguno de los participantes tuvo resultados, y todos abandonaron la investigación.

Solamente ella había tenido una reacción de adicción al medicamento y, ya que no sería comercializado, su única opción era recurrir a quien la había metido al experimento.

Este hombre se comprometió a darle las pastillas, a cambio de que ella le pagara con favores sexuales.

Jack se enloquece al saber todo esto. Pero, también siente curiosidad por el medicamento.

Al no poder encontrar ninguna pastilla va a encontrarse con el hombre que le daba las pastillas a su esposa. Aunque su intención era pedirle más, la ira lo lleva a intentar asesinarlo, sobre todo al darse cuenta de que ya se había cruzado con él varias veces en el pasado.

Finalmente, su esposa llega y, entre ambos, se deshacen del hombre y el arma. Ya que no pueden ir al hospital, van a un convento en el que los atiende una monja que afirma no creer en Dios.

Ella deja un mensaje final sobre cómo, a pesar de no creer, sabe que la fe es necesaria para que la humanidad siga existiendo, y no termine enloqueciendo por el temor a la muerte.

 

¿Vale la pena «Ruido de fondo»?

Ruido de fondo es el tipo de película que se enfoca más en el tema que debate, que en su trama en sí. Es por esto que en muchas ocasiones se sienten como si algunas escenas estuvieran allí solo para mencionar una cosa u otra.

En el caso de la enfermedad, termina tan rápido que termina por parecer irrelevante. Al igual que la subtrama de la infidelidad de la esposa.

Los personajes terminan por aceptar el concepto de la muerte, y lo cerca que están de esta en todo momento. Se vuelve algo cotidiano, haciendo del final un poco flojo.

Aun así, es una película muy interesante, perfecta para debatir un rato sobre el tema, pero no muy recomendable si solo buscas algo entretenido.