Spirit el indomable
En un 2021 lleno de secuelas y remake, pareciera que DreamWorks, y otros estudios, se han quedado sin imaginación. Entre este tipo de películas, llega Spirit el indomable 2021, un remake de la reconocida Spirit.
No es de extrañar que muchos estudios están apostando por los remakes este año, ya que con los problemas ocasionados por el covid, como es el cierre de los cines, las ganancias de las películas se han visto muy afectadas. Aunque lo peor del distanciamiento social ya pasó, muchos cines siguen sin operar, o lo hacen vendiendo menos boletos, para no llenar las salas.
Es por esto que, apostar por nuevas tramas, se ha terminado convirtiendo en algo muy impredecible. Incluso si sale una muy buena película con argumentos nunca antes vistos, puede terminar estrenándose en medio de un nuevo brote de covid, lo que cerraría nuevamente los cines.
En cambio, con las películas que ya tienen asegurados los espectadores, que apelan a la infancia, el riesgo no es tan malo, ya que de una u otra forma, se da la venta.
Reseña
Spirit el indomable nos cuenta la misma historia sobre la libertad, pero contada, en esta ocasión, por la otra cara de la moneda.
Spirit un corcel indomable, nos relata la historia desde la perspectiva del caballo, haciendo todo lo posible por asegurar su libertad, mientras descubre el mundo, e iba formando lazos de amistad y amor, durante su travesía. Una película que nos revela el profundo deseo del corcel, mientras le enseñaba al mismo, lo que era la verdadera libertad, junto a aquellos que amaba.
Todo esto sin necesidad de diálogos por parte del protagonista, con mucha expresividad y algún que otro aporte de su amigo humano, cuando eran realmente necesarios diálogos para ciertas escenas.
Por otra parte, en esta nueva entrega, Spirit pasa más a un segundo plano, aunque sigue siendo un foco de la trama. Nos centramos ahora en Locky, la protagonista de este filme, una niña encaja con el lugar, y las personas con las que vive. Ella es el tipo de persona que no soporta estar encerrada, y que busca cualquier medio para hacer lo que desea.
El deseo de la niña
En este sentido, podemos ver el espíritu rebelde que identifica a la película, dentro de esta niña. Locky está ansiosa por poder salir, por ir a jugar y pasar el rato, estando completamente aburrida de su vida actual. Por esto, termina metiéndose en varios problemas, al no comportarse correctamente, causando incluso algunos destrozos.
Es por esta razón, que su abuelo, la persona que cuidaba de ella, decide enviarla un tiempo con su padre al campo, hasta que mejore su forma de ser, y él termine con sus asuntos de trabajo.
Apenas iniciando el viaje, Locky es incapaz de mantenerse quieta, por lo que al ver a una manada de caballos corriendo junto al tren, ella comienza a correr hasta el final del mismo, solo por querer tocar a uno de los caballos. Esto, siendo completamente impulsivo, también es peligroso, ya que estuvo a punto de caerse del tren, salvándose solo porque un hombre la siguió para ver que no se hiciera daño.
Esto, junto a sus travesuras al inicio de la película, nos revela cómo será el comportamiento de la película durante toda la cinta, rebelde, valiente, y muy imprudente.
Y es aquí cuando vemos la primera gran diferencia con su predecesora, pues si bien Spirit no temía ponerse en peligro, tampoco llegaba a ser tan imprudente como para meterse en problemas solo por un simple momento de diversión.
El temor del padre
Al ver su pasado, descubrimos que la madre de Locky murió al intentar realizar trucos con su caballo, terminando envuelta en un accidente. A pesar de haber pasado hace muchos años, cuando Locky aún era una bebé, su padre jamás la olvidó, y vive con la carga de ese recuerdo.
Es debido a esto, que se torna muy sobre protector con Locky cuando se trata de caballos. Cuando ella le cuenta del caballo Spirit, él reacciona de mala manera, impidiéndole seguir viéndolo. Claro que, Locky no hace caso y sigue intentando domar al caballo, haciendo que su padre se preocupe cada vez más.
Locky no entiende la sobreprotección de su padre, asegurando que los caballos no tienen la culpa de la muerte de su madre. A pesar de esto, ella se mete en un peligro tras otro, por su capricho de querer domar a Spirit.
El mayor problema surge cuando la manada de Spirit es capturada por el viajero que ayudó a Locky al inicio de la película. Spirit, preocupado, intenta ir tras el tren que se llevó a su manada, dejando sola a Locky, pero al rato regresa para buscarla, consiguiendo que ella y sus amigas lo ayuden a liberar a los demás caballos.
Durante el trayecto, las chicas deben pasar por lugares peligrosos, sin haber avisado a sus padres antes de irse, por lo que ellos no saben exactamente dónde están sus hijas, pero que, por supuesto, no llega a verse como parte real del problema, ya que se trata de una película más bien infantil.
Todo se resuelve con las niñas liberando a los caballos, y sus padres llegando para ayudarlas. Un final feliz, donde la manada y Spirit se van por su lado, y Locky se va con los demás humanos.
Aunque Locky se siente un poco triste por no ver más a Spirit, aprende a llevarse bien con su familia, y se hace más cercana a sus amigos, dejando un mensaje de amistad y valentía.
Conclusión
La película es buena, aunque un tanto floja, quedando bien para el público infantil y familiar. El mayor problema de esta sería el hecho de que realmente no necesita tener a Spirit como parte de los personajes, fácilmente podría tratarse de un caballo nuevo, y eso no habría alterado la trama en lo más mínimo.
Usaron la inclusión del Spirit como simple herramienta de marketing para asegurar las vistas, pero hasta ahí. Podemos decir que nos recuerda a Spirit por lo terco del caballo, y por querer vivir libre, pero al no ser el protagonista, y no tener una historia tan desarrollada, su nombre y aspecto no agrega nada, ya que existen muchas películas de caballos con esas características.
