Starstruck, la fama y las relaciones

Starstruck, mi novio es una superestrella

starstruck

Starstruck es una de esas películas de TV de Disney que pasaron sin pena ni gloria, por lo cual, muy pronto fue olvidada por la mayoría. Es una película que verías por aburrimiento, y podría llegar a gustarte un poco si no te pones a analizarla, pero que sin duda muy pocos llegan a ver una segunda vez por puro gusto.

A pesar de esto, en su momento llegó a hacerse con más de un fan que amó la película, solo para darse cuenta más adelante en su vida que realmente el filme no tenía mucho para ofrecer. Aun con todo esto, realmente no hay algo tan resaltante como para directamente llamarla una mala película, simplemente, no es la gran cosa. 

Starstruck del 2010 quedó como ese estudiante promedio que se sienta en una esquina y es ignorado todo el año hasta que pasan la lista de asistencia. Por supuesto, no por ello dejaremos de darle un análisis adecuado para sacar todo lo bueno y lo malo de esta película.

 

La trama

Por si nunca la viste, o apenas la recuerdas, Starstruck seguía la historia de Jessica Olzon y Christopher Wilde. Por un lado, una chica completamente “ordinaria”, “como cualquier otra”, sin ningún talento en específico, ni nada que la haga destacar. 

A pesar de pintarla de esa forma en comparación con su coprotagonista, también se nos muestra como una especie de “única y diferente” que en ese tiempo estaba de moda, es decir: 

  • Chicas que “no seguían la corriente”: No le gustaba el mismo artista que a las demás.
  •  Chicas “distintas”: Quedarse unos instantes leyendo en cualquier sitio, pareciendo “intelectual”. 
  • Y ante todo “únicas”: Pues solo ella puede hacer cambiar al protagonista.

Mientras, del otro lado está Christopher, la superestrella juvenil de vida “perfecta”, con cientos de responsabilidades y relaciones falsas que solo están allí para obtener algo a cambio, como la fama o el dinero. 

Ambos se conocen por pura casualidad, cosa que los lleva a tener un par de discusiones debido a sus personalidades opuestas, lo que muy pronto se va tornando en amor, al empezar a entenderse mutuamente. Es gracias a esta interacción franca y sin filtros que ambos crecen y se enamoran, causando algunos problemas por el tipo de vida que lleva Christopher.

Starstruck, mi novio es una superestrella

Los problemas de la fama

Esto es algo a lo que nos acostumbramos a ver los fans Hannah Montana. Este tipo de trama nos lleva a ver el otro lado de la moneda, el cómo esa vida idílica y glamurosa que tanto llegamos a soñar en algún momento de nuestras vidas, no es tan simple como parece, requiere de mucho esfuerzo, y trae demasiados problemas, que podríamos no saber manejar. En este caso, Christopher ve como todo a su alrededor se va volviendo artificial, simple, olvidando lo bueno y bello de las cosas simples.

 

Sus relaciones

En primer lugar tenemos a sus padres, quienes se suponen deben ser el apoyo de sus hijos, en este caso se encuentran tan inmersos en su trabajo como manager de su propio hijo que, a pesar de estar casi siempre en casa, y de trabajar directamente con su hijo, casi no interactúan con él, como si se tratara de un simple cliente. Esto lleva a Christopher a sentirse solo, aunque no termina de mostrarse del todo en la película, sino que simplemente los señalan como algo más del montón de cosas que afectan al protagonista. 

Tenemos también su falta de amigos, al estar junto a él una única persona, que tampoco llega a sentirse del todo real, como si fuera alguien plano, cosa que realmente no queda claro si es por cómo Christopher ve el mundo, o simplemente porque las actuaciones de los secundarios en esta película dejan que desear, siendo extremadamente planos en muchos casos. Además, podemos destacar a su novia, la cual usa la primera excusa que sale para abandonarlo e irse a una cita con alguien más famoso que él, como si su supuesto romance con él hubiera sido planeado desde un principio. 

Con todo esto, ya debe tener en su mente la idea de que nadie se le acercará a menos que tenga segundas intenciones, lo cual lo hace dudar un poco cuando conoce a Jessica, quien por pura casualidad, termina conociéndolo y tratándolo de mala manera por ser una estrella, resaltando su odio por las cosas “de moda”.

Aquí pasan varias cosas bastante cuestionables en la toma de decisiones de cómo seguir la historia, puesto que ocurren cosas como que Jessica se monte en el auto de Christopher y lo siga sin objeciones a cualquier sitio que la lleve, a pesar de ser un extraño que, siendo o no una celebridad, igualmente puede llegar a ser mala persona hasta donde Jessica sabe.

Fuera de esto último, la película llega a dar un mensaje bastante decente sobre la parte mala de la fama, pero como mencioné, es algo al estilo Hannah Montana, sobre tener amigos y una vida normal a pesar de la presión de los medios. Realmente no es de las peores películas Disney, pero tiene tan pocas cosas a señalar que no es un filme que recomendaría.