The Fallout, el duelo y el miedo

The Fallout

The Fallout

The Fallout es una película de Amazon sobre el duelo y el apoyo, mientras toca un tema particularmente sensible en Estados Unidos, el de los tiroteos en escuelas.

Se trata de una película lenta, centrada en el sentir de la protagonista y aquellos que la rodean y vivieron lo mismo que ella. Algo muy bueno de esta película es que podemos ver, aunque sea por encima, cómo cada uno de los involucrados reacciona de manera distinta, a pesar de que todos inician igual.

 

La trama

Seguimos la historia de Vada, una adolescente común que va al instituto, cierto día, justo cuando se encuentra en el baño comienza un tiroteo en su escuela. Sin ningún lugar a donde poder huir, ella se debe esconder dentro de los baños con Mia, una chica que por casualidad se encontraba allí también en ese momento.

Ambas tiemblan del miedo y ruegan por su vida esperando que todo termine rápidamente. En medio de todo esto, llega Quinton, asustándolas por un momento, él nos cuenta sobre cómo su hermano falleció en sus brazos, y se queda con las chicas hasta que todo termina.

Una vez en casa, Vada no puede terminar de procesar todo lo que acaba de vivir, por lo que comienza a distanciarse de sus amigos y familiares. Al no sentirse cómoda hablando de estos temas con sus padres, u otras personas, ella busca la manera de contactar con Mia, para así poder hablar con alguien que entiende exactamente por lo que está pasando.

Debido a esta desafortunada conexión que tienen, ambas se vuelven amigas cercanas muy rápido, dejando a todos los demás en segundo plano, centrándose en su dolor y la forma en que pueden olvidarse del mismo. Todo parece perfecto, hasta que, en casa de Mia, comienzan a consumir sustancias ilícitas que las llevan al borde de la muerte.

Vada se pregunta, durante todo este trayecto, si es realmente justo que ella esté viva, malgastando de esta forma su vida, cuando otras personas fallecieron sin ninguna distinción

The Fallout, el duelo y el miedo

El duelo

Aun si Vada no perdió a alguien cercano en el tiroteo, ella carga con el duelo de todos los estudiantes fallecidos, sintiéndose sumamente culpable y confundida ante el hecho de que ella se encuentra con vida, a salvo, cuando ellos no tuvieron la misma suerte. Este tipo de pensamiento la lleva a asistir a cada funeral, aun si no conocía a la víctima, así mismo, siempre los mantenía en su mente, y se reprochaba por no poder hacer nada por ellos.

Su mejor amigo, Nick, al que abandona luego del incidente, se encuentra en una posición completamente contraria. Él quiere aprovechar su vida, y su voz, para exigir la seguridad que les faltó a las víctimas, convirtiéndose en un activista, apoyando por todos los medios posibles a las familias y la comunidad, asegurando un mejor futuro.

Quinton, al principio lo vemos pasando el duelo por su hermano, nos habla de lo mucho que lo extraña, pero también se muestra feliz de poder hablar sobre él apenas se le da la oportunidad. Lejos de sentirse culpable, o comprometido, Quinton simplemente quiere honrar a su hermano recordando todo lo bueno.

Por último, Mía es, a pesar de estar tanto tiempo en pantalla, la que menos parece importar. Ella tiene un duelo aparentemente similar al de Vada, sin embargo, Mía no actúa por culpa, sino por miedo, por inseguridad.

Mía consigue en Vada toda la seguridad y confianza que necesita, se siente en calma, lo que le permite descansar un poco. De hecho, si no fuera por las sustancias que comienzan a consumir, fácilmente su amistad pudo ser un verdadero pilar para su recuperación y superación, por el contrario, el consumir las mantenía en un peor estado, haciéndolas dependientes.

 

Intentar volver a la realidad

Vada no quiere volver a clases, no quiere enfrentarse a aquello que la atormenta y le causa miedo, intenta huir de todos sus problemas en todo momento. Ella rechaza las oportunidades de estar en terapia, y, por si no fuera poco, estos mismos intentos de terapia son los que la llevan a terminar de alejarse de su familia.

Cuando al fin se da la oportunidad de continuar con su vida todo parece ir muy bien, al menos hasta que debe ir al baño, y se niega a ir, aguantando, por miedo a entrar allí. Por esto, al asustarse luego con el sonido de una lata, que confunde con las balas, se orina encima.

De la misma forma, aun cuando se abre a sus familiares y busca ayuda psicológica, estando ya aparentemente bien, se retuerce de miedo de nuevo cuando descubre el suceso de otro tiroteo, en un colegio cercano. Esto nos da a entender que probablemente la razón de su miedo jamás acabe, pero aun así, tiene que buscar la manera de sanar y recuperar su confianza.

De otra manera, ella estaría encerrada por siempre, y muy probablemente terminaría recayendo en la adicción.

 

La aceptación

Lo que más se dificulta para Vada es aceptar que ella no tiene nada que ver, ni mucho menos es responsable de lo ocurrido. Además, el volver a sentirse cómoda y feliz en los lugares donde ocurrió su trauma es algo que apenas logra superar con el tiempo

Algo interesante, es que en la película, su madre, al escuchar todo lo que hizo, no la juzga ni sé molesta, sino que directamente la apoya y le da lo que necesita para sanar. Esto claramente quiere dar el mensaje de confiar en los padres y familiares, aunque la mayoría de padres en una situación similar no aceptaría todo esto de golpe con calma.