Zootopia, la discriminación explicada con animales

Zootopia

Zootopia

La aclamada película sobre animales antropomórficos viviendo en “armonía”. En su constante intento por hacernos ver que lo “diferente” está bien, que podemos ser aceptados como somos, Disney nos trae en esta ocasión, una película que logra ir más allá que la típica crítica adolescente, profundizando en ciertos temas que hacen la película disfrutable, tanto para niños como para adultos.

Resumen

Judy es una coneja del campo, que sueña con ser policía en la gran ciudad. Por obvias razones, ella tiene muchas dificultades para lograr su meta, aun así, les hace frente, y consigue graduarse como la mejor de su clase.

Desde un principio Judy, quieren vendernos la idea de que en Zootopia todos pueden ser lo que desean, independientemente de su especie, y los estereotipos que esta mantenga. Sin embargo, desde que llega a la ciudad nos damos cuenta de la realidad.

Si, todos pueden trabajar en lo que quieran, pero la discriminación sigue estando ahí, el temor constante de los herbívoros hacía los carnívoros, aun si estos son sumamente amables y tranquilos.

Esta discriminación la vemos perfectamente representada en Nick, el zorro, quien desde niño deseó formar parte de algo bueno, como los scouts, o la policía, pero que terminó dejando de lado esa idea, luego de que todo el mundo lo tratara como un criminal. La presión constante por cómo era visto, terminó por convertirlo justamente en eso, un animal astuto y sin vergüenza.

Pronto se nos revela el conflicto de la trama. Mientras Judy pide a su jefe una oportunidad de demostrar que no es frágil, y que puede trabajar junto a los demás. En eso nos enteramos de que hay casos de desaparición, cosa que Judy termina tomando como un reto.

Mientras investiga, tomando a Nick como informante, se descubre que hay varios casos de carnívoros volviéndose “salvajes”. Esto la hace dudar, reforzando la creencia que guardaba en su interior, de que los carnívoros son animales temibles y violentos, que en cualquier momento pueden volver a caer en sus instintos asesinos.

Todo se vuelve un caos cuando Judy, sin malas intenciones, dice frente a las cámaras, un comentario “racista”, sobre cómo los carnívoros son un peligro potencial en esos momentos.

Las calles se llenan de protestas, de carnívoros que alegan injusticia ante este trato, herbívoros que piden que estos animales “peligrosos” sean retirados de las calles, y algunos grupos intermediarios que solo desean la paz entre especies.

Incluso Nick, su compañero, se siente herido por el comentario, cayendo en cuenta de que ni siquiera ella lo apoya.

Como es ya típico en Disney, la trama da un gran giro, cuando vemos que el villano real, siempre fue Bellwether, la oveja secretaria del presidente, en un plan para quitar a los carnívoros del medio. Para con esto poder posicionarse como la nueva líder, cambiando las normativas, para que los herbívoros se vuelvan privilegiados, y los carnívoros marginados.

Y claro, los protagonistas dejan de lado las diferencias, para vencer al villano, y terminar en un final feliz, donde los animales gocen de una verdadera utopía, donde todos pueden ser lo que desean.

Zootopia

Crítica

Ver los problemas de las personas reflejados en animales, puede hacer que el mensaje pase de forma más sutil, pero aun así es una muy buena forma de contar un mismo concepto, en un ambiente y trama completamente diferentes.

Zootopia logra retratar un grave problema de la sociedad, que son las apariencias. Lo que es el racismo, el sexismo, e incluso la xenofobia, todos representados, de una forma más atrayente y dinámica.

Es por la apariencia victimista, débil y frágil de los herbívoros, que suelen ser rechazados por ciertos cargos o situaciones, en los que se necesita “más fuerza” o altura, o cualquier otro. De la misma forma, es la razón por la cual es tan fácil para Bellwether hacer creer a todos que están en peligro.

Al final, la cantidad de odio y miedo hacía los carnívoros, no es porque de un día para otro haya casos de “salvajismo”, sino porque el estereotipo ya estaba implantado en sus mentes desde que nacen, en una combinación de los restos de su instinto de supervivencia, en conjunto con las malas lenguas que hablan sobre lo peligroso que puede ser su simple presencia.

En cuanto a los carnívoros, no es como si su vida fuera un cuento de hadas, pues mientras los herbívoros tienen una idea equivocada de ellos, estos deben luchar cada día para demostrar que no son una amenaza, que no hay razón de preocuparse. Por esto, animales temibles, como un león, tendrían que mantener sus emociones en perfecto control, ya que tener un momento de rabia, por mínimo que sea, puede causarle un infarto al pobre ratón que se sienta a su lado.

Es por esto que tienen algunos problemas en las marchas, luego del discurso por televisión de Judy, ya que quieren defender sus vidas, y su libertad, pero saben que si le hablan con un tono demasiado fuerte a un herbívoro, podría asustarse, y malinterpretar la situación.

Todas estas cosas nos recuerdan al racismo, la forma en que aún hay personas que piensan que solo por el color de piel una persona está más predispuesta a ir por la delincuencia, o la maldad, aun si no hay hechos reales que mantengan esta afirmación.

En el caso de Zootopia, si, los carnívoros en algún punto de la historia si fueron “los malos”, sin embargo, en la película se nota que ya han pasado miles de años de evolución, en los cuales esos “instintos asesinos”, se fueron menguando, hasta dejar de existir.

Por supuesto, aunque se tocan buenos temas, no se termina de profundizar debido a las restricciones de Disney, en cuanto a qué tan oscura puede ser una trama.

Ahora, si lo que buscas es una historia que si muestre cómo sería realmente una sociedad de animales, lo más realista que se puede conseguir es el anime Beastar, donde de nuevo tenemos a animales actuando como humanos, pero en esta ocasión, sí existen esos instintos, y los animales deben luchar en contra de su propia naturaleza para poder vivir en armonía.